El símbolo del viejo San Mamés ya está en su ubicación definitiva. El pasado viernes, sobre las 12.00 horas,
comenzó el montaje del arco en el lateral de uno de los campos de
Lezama, en el que suele jugar el Bilbao Athletic. Los trabajos se prolongaron durante 3 horas.
Todavía tenemos en la retina los primeros trabajos para desmontarlo y la expectación que despertó entre los hinchas rojiblancos. Ahora, lejos del bullicio de San Mamés en días de partido, escuchará los gritos de los jóvenes en Lezama mientras, poco a poco, se convierten en rugidos.
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